Un caso clínico, donde la esterilización fue la solución

Hace un par de días atrás visitó el Centro de Esterilización una gatita para ser operada.

No presentaba ninguna anormalidad física, ni signos que indicaran una patología, por lo que ingresó sin mayores problemas a pabellón.

Durante la cirugía, se detectó un pequeño tumor a nivel de útero...

Los tumores uterinos son raros en las gatas, aproximadamente del 0,2% al 1,5%. Los animales más afectados son los de edad media a viejos. 

La mayoría de los tumores uterinos son originalmente mesenquimales. Los leiomiomas suman el 85-90% y los leiomiosarcomas un 10% de los mismos. En raras ocasiones se han descrito adenomas, adenocarcinomas, fibromas, fibrosarcomas y lipomas. 

En el gato los adenocarcinomas constituyen la mayoría de los tumores uterinos y se forman a partir del endometrio. Has sido descritas metástasis en cerebro, ojos, ovarios, glandulas adrenales, pulmones, hígado, riñones, vejiga, colon, diafragma y ganglios linfaticos regionales.

Los signos clínicos pueden no estar asociados con un adenocarcinoma uterino felino hasta que el tumor no crezca lo suficiente. La secreción vaginal es frecuente y puede variar de purulenta a mucoide o a hemorrágica y oscura. Otros signos clínicos descritos incluyen ciclos estrales anormales, polifagia, poliuria, vómitos y distensión abdominal. Los signos clinicos pueden aparecer como resultado de una enfermedad metastásica antes que observar cualquier indicio clínico del tumor primario.

El diagnóstico se realiza en base a la histopatología de las muestras escindidas quirurgicamente. La ecografía puede ayudar a delimitar el origen de la masa, pero el utero de la gata no puede ser visualizado a menos que contenga fluido, un feto o una masa.

El tratamiento es la ovariohisterectomia completa y debe intentar incluir todos los tumores y focos de metastasis. (*)

Afortunadamente para éste paciente, la esterilización preventiva logró detectar esta masa de crecimiento anormal, siendo el tratamiento de elección la misma esterilización. 

La detección temprana de ésta masa logró evitar graves problemas posteriores, pues lamentablemente éste tipo de patologías no muestra mayor signología hasta que ya se encuentra bastantante avanzada.

Mucha suerte tuvo esta pequeña!

(*)De Withrow y McEwens Oncologia Clinica de Pequeños Animales.